- Delfina Gómez Álvarez, iniciará gira de agradecimiento por todo el territorio mexiquense.
- En ese ínter lo electoral se transformará en político, lo que implica la disputa por los cargos públicos.
- MORENA, PT y PVEM tienen los mismos derechos para incidir en el gabinete derivado de la figura comicial y legal con la que participaron en las urnas.
- Aun cuando la nueva Gobernadora podría destrabar este compromiso mediante los posibles convenios de tipo electoral signados ante el IEEM previo a las elecciones del pasado 4 de junio.
Si bien es verdad que a partir de este día Delfina Gómez Álvarez inicia otro recorrido por el Estado de México en gira de agradecimiento, a la vez su equipo de “científicos” emprenderá las actividades de transición.
En la época más reciente del priismo que se anquilosó por 94 años en Palacio, cada relevo sexenal implicó millones de pesos del erario para concretarse ; es decir, las finanzas públicas se encargaban de pagar todos los movimientos de transición, incluso se programaba cierto monto discrecional para ese momento entre iguales, los priistas que entraban y los priistas que salían, fueron valores entendidos.
Se desconoce si en el caso de esta primera transición sexenal con un partido ganador distinto al PRI se aplicará la misma regla por parte de la administración saliente.
Posiblemente sí se requiere de recursos públicos para el cambio de estafeta y, de ser así, la administración entrante estará obligada a informarlo en aras de la transparencia y combate a la corrupción desde el primer minuto del nuevo ente que encabezará la ya gobernadora electa.
Mientras los “científicos” de Delfina Gómez Álvarez operan la transición y la gobernadora electa recorre de nuevo ciudades, pueblos y rancherías en afán de agradecimiento, seguramente la futura titular del Ejecutivo estatal no se quedará a la zaga respecto a la puja y patadas bajo la mesa para alcanzar los cargos públicos, pues en los círculos de la Cuarta Transformación también pulula la especie de la feroz lucha por el poder, no todo es romanticismo de izquierda y pueblo bueno.
1.- No se debe olvidar que el triunfo en las urnas se concretó mediante la figura de candidatura común.
2.- Lo que equivale que tanto MORENA, PT y PVEM tienen los mismos derechos en la conformación del gabinete tras el éxito comicial, como ya se abordó líneas arriba.
O bien se pasa a la etapa de revisar los posibles convenios signados ante la autoridad electoral, mismos que se deben respetar, de lo contrario se tras bordará de manera incómoda e intempestiva de lo electoral a lo político, cuando hay todas las condiciones para que eso ocurra en un ambiente de terciopelo, como suelen describir políticos europeos.
Y es que un encontronazo entre políticos de MORENA, PT y PVEM en aras de los cargos públicos no abonaría a un final democrático entre las descritas siglas, aún cuando posiblemente los personeros del Partido del Trabajo hayan negociado candidaturas a senador, diputados federales y locales y cierto paquete de ayuntamientos para los comicios del año que entra y cuyas actividades están en ciernes, lo mismo podría decirse de los representantes del Partido Verde Ecologista de México, no obstante que en este último organismo las ambiciones son de más largo aliento, del tamaño de su cinismo y desvergüenza política.
