ANÁLISIS | Tomás Flores Rosales

ANÁLISIS | Tomás Flores Rosales

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  • PRI, al rescate del “voto duro” para comicios de junio próximo.
  • PAN y PRD, en busca de la alianza o coalición para sobrevivir en el sistema de partidos mexiquense.
  • “Voto razonado”, la otra estrategia ganadora a favor del organismo en el poder estatal.
  • SÍNTESIS POLÍTICA
  • Claudia Sheinbaum anuncia su casamiento con su novio de la universidad.

Una eficaz e intensa campaña del priismo mexiquense orientada a reactivar su “voto duro” no requerirá del  PAN y menos del PRD en alianza o coalición, por lo que los tácticos, estrategas y reales dirigentes tricolores podrían ser la solución para recomponer el perfil electoral del organismo.

Y es que de entrada, los priistas ya tienen dos ventajas:

     1.- Que son gobierno en el Estado de México, y

     2.- Que la mayoría del anotado “voto duro”  -si se le incentiva – podría depositarse en las urnas sin miramientos de ningún tipo.

Agregando a todo ello el “voto razonado”, sufragio cuyas características se anidan en un considerable porcentaje de los ciudadanos mexiquenses en general, mismos que después de cuatro años de Obradorismo se tienden ahora hacia el centro del espectro comicial, justo en la línea divisoria favorecedora al PRI.

Y es que de no aplicar una precampaña y campaña mediante rutas críticas , los y las priistas podrían perder por adelantado la justa del 4 de junio próximo , marasmo de indecisiones que han alimentado este supuesto que debe ser despejado en los próximos 37 días ; es decir , al 31 de diciembre próximo.

Insistir en que el PRI es gobierno en tierras mexiquenses y que eso le permite continuidad en la titularidad del poder Ejecutivo no sería la panacea pero constituye herramienta necesaria para partir de cero el primer minuto de enero próximo y así aplicar tácticas y estrategias que por más de 80 años les han funcionado.

No sería la vez primera que el PRI del Estado de México sale de atrás, parafraseando a los narradores de fútbol en estos momentos en boga:

     A.- Durante el periodo de precampaña velada de Enrique Peña Nieto, en la elección de 2005, el hoy ex gobernador era plenamente desconocido, incluso hasta por las huestes de su mismo partido, el PRI.

     B.- Tal vez con los mismos niveles de desconocida que enseña en estos momentos Alejandra del Moral Vela, con la diferencia que la hoy prospecta ha fungido como lideresa del partido y la identifican la “selfies” de las cuales disfruta aún cuando esa práctica de las nuevas tecnologías no se conviertan en votos.

En dicha elección, Enrique Peña Nieto, prácticamente estaba arrinconado en los resultados de las encuestas:

     a).- el finado Rubén Mendoza Ayala le aventajaba  con más de 20 puntos a casi cuatro meses de la jornada de votaciones.

     b).- una movilización basada en la “inteligencia electoral” permitió que día a día, minuto tras minuto, se fueran revirtiendo los números en las estadísticas.

     Hasta prácticamente empatar la justa casi en la víspera de la instalación de las miles de casillas en todo lo largo y ancho del territorio mexiquense.

Acudiendo para ello:

     I.- A la Política.

     II.- A la negociación.

     III.- Al convencimiento.

     IV.- A la sensibilidad, y

     B.- A  la observación.

Todo un poema para que el PRI se sostuviera en el poder que en breve habrá de dejar Alfredo Del Mazo Maza, cuya obligación es entregar el cetro a sus iguales en el partido, pues de no actuar en consecuencia la fórmula del triunfo no funcionará.

Y es que pensar la elección de Gobernador del Estado de México desde el apalancamiento de PAN y PRD podría convertirse en una falacia en virtud de que paradójicamente si se llegara a formalizar la alianza o coalición ante el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), podrían emanar dos únicos resultados:

     1.- Que el PRI es el que le dará los votos al PAN para que se mantenga en movilidad, y

     2.- Que el PRI también le otorgará los votos al PRD para su subsistencia en el sistema de partidos mexiquense.

Los votos que le podría sumar el PAN al PRI no están plagados de muchos esfuerzos para sus dirigentes, pues con alianza o sin alianza, panistas de distintas regiones mexiquenses no optarán a favor de su partido en junio próximo y por tanto sufragarán por el tricolor en un acto de inconformidad a los actuales líderes estatales blanquiazules.

 Los votos que le podría otorgar el PRD al PRI serán imaginarios, pues el llamado partido del sol azteca no tiene ni siquiera militantes para un día de club, aún cuando esto último mejor se debería describir como un día en la alameda.

Es verdad que en el terreno de la estética electoral, los y las dirigentes priistas podrían sentirse cómodas difundiendo determinada unión de fuerzas , incluso para los números que arrojan los sondeos son materia las alianzas o coaliciones, pero en lo que respecta al espectro electoral mexiquense es un mundo de votantes potenciales en comparación de pequeños padrones que se anidan en el resto del país , lo que convierte al PRI estatal en una maquinaria de fabricar votos suficientes para ganar la elección de gobernador o gobernadora siempre y cuando recupere sus dos herramientas sustanciales :

     UNA.- El voto duro, y

     DOS.- El voto razonado.

SÍNTESIS POLÍTICA

El que al  parecer se la lleva muy tranquila es el titular de seguridad pública del Estado de México, Rodrigo Martínez-Celis Wogau, quien con las reuniones semanales en palacio de gobierno se da por bien cumplido, pues pareciera que la política de prevención de delito no se aplica y solo cuando surgen las emergencias actúa quizá en consonancia con sus iguales del gobierno de la Ciudad de México en lo que respecta a la incidencia delincuencial en el valle de México, pero en el resto de las regiones mexiquenses los grupos de la delincuencia organizada actúan con toda libertad, léase el sur de la entidad en donde la labor de inteligencia seguramente tiene bien identificados a los líderes que generan miedo e incertidumbre a los pobladores, incluso los mismos lugareños como en Tejupilco queman patrullas para denunciar los abusos de agentes estatales de seguridad y no pasa nada dejando una estela de impunidad tanto hacia los agresores como a los denunciados uniformados, por lo que el sur continuará siendo un filón de alto riesgo que en cualquier momento se puede desbordar.

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La verdad que Elías Rescala, líder de la bancada priista en el congreso local,  la tiene bien fácil, el proyecto de presupuesto integrado en la iniciativa del paquete fiscal 2023 enviada por el gobernador a la cámara es tan flexible que hasta Maurilio Hernández, coordinador de la bancada de MORENA, se atrevería a respaldar al priísta para que no vaya a complicar la especie y por primera vez haga su trabajo bien a favor del gobernador en turno.

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Por tratarse de la mujer que en dos años podría fungir como primera presidenta de la República, trasciende lo que en su edición de ayer divulgó el diario El País, que describe lo siguiente:

“Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México y una de las aspirantes a la presidencia del país, ha anunciado este miércoles que se va a casar con su novio Jesús María Tarriba, analista de riesgos económicos en el Banco de México. Todavía no han definido una fecha para la ceremonia. Llevan saliendo seis años, pero la pareja se conoce desde la universidad, donde fueron pareja durante un año y tres meses. Después sus vidas tomaron caminos separados y no volvieron a encontrarse hasta mucho tiempo después.

 “¿Viven juntos?” preguntaba Martha Debayle en su programa en W Radio. “Sí, sí, nos vamos a casar”, contesta Sheinbaum con una sonrisa. La conversación había virado hacia las dificultades de encontrar el amor cuando se dedica tanto tiempo al trabajo. “Sí, yo encontré el amor, tuve mucha suerte”, contestaba ella. “Mi pareja es mi novio de la facultad”, confesó la mandataria.

Jesús María Tarriba, doctor en Física por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró en una entrevista en el programa El Octágono, de la cadena La Octava, que a él sí le fastidió cuando lo dejaron mientras estaban en la universidad. “La descuidé, la perdí y luego sí me arrepentí”, confesó el hombre de 61 años. Después de su pasó por la facultad se fue a España a buscar suerte, y allí se quedó durante muchos años. Se casó y trabajó en el sector financiero, en Banamex como analista cuantitativo de 1994 a 1997 y después, durante 16 años, como analista y jefe de modelos de riesgo en el Banco Santander.

Mientras, Sheinbaum, a través del Consejo Estudiantil Universitario (CEU) de la UNAM, se alejó de la Física y se fue involucrando cada vez más en política y en materias medioambientales. Se casó con el político Carlos Imaz Gispert, que fundó junto al resto de participantes del CEU el Partido de la Revolución Democrática (PRD). En 1995 se doctoró en Ingeniería Ambiental y posteriormente se incorporó al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, cuyo trabajo recibió el Premio Nobel de la Paz en 2007. Desde el año 2000 ocupó distintos puestos en la administración pública.

En 2016, Sheinbaum, que trabajaba como jefa delegacional en Tlalpan, se divorció de su marido después de casi 30 años de relación y con el que tuvo dos hijos. Izman Gispert, durante su etapa como Jefe Delegacional en Tlalpan, se vio envuelto en un escándalo político que afectaron a toda la alcaldía. Cinco meses después de asumir el cargo en 2004, salieron a la luz unos vídeos que le implicaban, a él y a otros políticos, en una trama de corrupción. Tuvo que dejar su puesto y enfrentó un proceso penal que terminó con su exoneración.

Poco después de que la pareja se divorciase 12 años después, la jefa de Gobierno cuenta en una entrevista que estaba en su despacho comiendo y echando un vistazo a su Facebook, cuando de pronto le apareció Jesús María Tarriba, y le mandó una solicitud de amistad. Él aceptó y empezaron a escribirse. “Sigues siendo la misma persona en muchas cosas, y cuando te escribes te das cuenta de que hay muchas cosas que sigues teniendo en común”, confesó.

En ese momento, Tarriba se había divorciado y el salario que percibía en su trabajo le había permitido jubilarse. Después de muchas conversaciones, el físico fue a visitarla a México. Luego, cuando ella fue a visitarlo a él en España, Tarriba le dijo que quería volver a México con ella. Así lo hizo y desde entonces llevan ya seis años juntos. En el programa de W Radio, Sheinbaum ha dicho de él que “vive feliz leyendo, es su pasión”, y que ahora trabaja como analista para el Banco de México.

Claudia Sheinbaum es una de las aspirantes de Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, para sucederle en las elecciones de 2024. Según una encuesta de Enkoll para EL PAÍS realizada entre el 5 y el 8 de noviembre, ella es la favorita para suceder al presidente. La jefa de Gobierno es la aspirante mejor valorada y la que tiene mayor intención de voto, seguida de Marcelo Ebrard, Secretario de Relaciones Exteriores de México, el más conocido entre la ciudadanía.

“La verdad, soy feliz”, contaba Sheinbaum después del anuncio de su casamiento. “No pasamos mucho tiempo juntos porque yo siempre estoy trabajando, pero los tiempos que tenemos juntos los disfrutamos mucho”, dijo la mandataria, que además añadió que a veces tocan la guitarra juntos, como mostró en un vídeo directo en Facebook hace unos meses. (Información firmada en el diario El País por el periodista Daniel Alonso Aviña)