- Después del primer minuto del 16 de septiembre próximo ya nada será igual en Palacio de Gobierno estatal.
- Delfina Gómez Álvarez se convertirá en la mujer más poderosa del Estado de México.
- Mienten aquellas y aquellos que intentan convertir de facto al séquito más visto de la nueva gobernadora como individuos de máxima influencia.
- Otras y otros son los que realmente detentan el máximo poder mexiquense después de la maestra.
- Andrés Manuel López Obrador + Claudia Sheinbaum Pardo = al binomio para el cambio sin violencia en México.
No es verdad lo que interpretan los bisoños en política en lo relativo a que la “transición” gubernamental mexiquense consiste en la simple entrega – recepción de la administración pública entre los gobernantes saliente y entrante.
Son maniobras más complejas que incluso los llamados operadores o integrantes de los equipos de las partes las desconocen.
En el caso mexiquense actual:
1.- Ni Horacio Duarte Olivares.
2.- Ni Higinio Martínez Miranda, y
3.- Ni mucho menos Maurilio Hernández González.
Están enterados de lo que platican en privado Alfredo del Mazo Maza y Delfina Gómez Álvarez, quizá, por tratarse de un parteaguas en la política mexiquense, el Presidente de la República, Andrés Manuel López obrador, es enterado de detalles que atañen al país desde tierras mexiquenses.
Por eso quienes dicen, publican y redactan que los más influyentes son los actores que acompañan al mandatario en funciones y a la gobernadora electa, respectivamente, están biológicamente equivocados, desconocen las entrañas del poder.
Esos “sótanos” -los cuales- la ex alcaldesa de Texcoco jamás imaginó conocer, una especie de secretos de Estado que constituyen la entidad mexiquense, misma que no se queda en el trillado discurso que equivale o se compara con una, dos o tres naciones de Centroamérica juntas u otras de Así o África.
Más allá del glamour geopolítico que represente dicha comparación, en la realidad es prácticamente literal el símil, por tanto:
A. – El gobierno mexiquense guarda asuntos más que relevantes.
B.- El gobierno mexiquense atañe asuntos de índole federal.
C.- El gobierno mexiquense es de interés nacional.
Luego entonces, los acercamientos Delfina Gómez Álvarez- Alfredo Del Mazo Maza están por finiquitarse en el marco del auténtico proceso sucesorio, del cual, como ya se esbozó líneas arriba, la inminente Gobernadora constitucional del Estado de México, será otra en los días por venir, cubierta del halo del real meta poder político, ese que ni Horacio Duarte Olivares, ni Higinio Martínez Miranda conocen aún y qué tal vez jamás experimentarán en el corto plazo.
De tal manera que alejada de las trivialidades de la política, Delfina Gómez Álvarez ya no volverá a ser la misma.
Se convertirá en la mujer más solitaria de Palacio a partir del primer minuto del 16 de septiembre próximo porque es la condición sine qua non del poder total.
SÍNTESIS POLÍTICA
De plano las interpretaciones que se le puedan dar al discurso vertido ayer por Marcelo Luis Ebrard Casaubón, aspirante de MORENA a la candidatura a la Presidencia de la República, se perderán en el contexto ya construido desde Palacio Nacional. Andrés Manuel López Obrador ha edificado en la persona de Claudia Sheinbaum Pardo a su sucesora, por lo que no habrá poder superior al presidencial que cambie su determinación, incluso el Tabasqueño ha depositado en Adán Augusto López Hernández toda su confianza frente a una eventual deformación de su proyecto personalísimo. El jefe del Ejecutivo federal caminó más de 20 años consecutivos para crear lo que hoy llama su movimiento, a la par de haber ideado un partido político para apuntalarlo cuyo acrónimo consiste en el Movimiento de Regeneración Nacional, cuyos cimientos los coloca en lo que se ha convertido en eslogan: “La Cuarta Transformación “.
Proyecto que a la vista se antoja de tres pistas pero es monolítico, orientado al cambio por la vía pacífica, expresión esta última no valorada por las sensibilidades populares, por eso la terquedad del Presidente en mantener el esquema de las conferencias de prensa matutinas, bautizadas como “Las Mañaneras” de resonancia internacional, modelo de comunicación que no ha sorprendido sólo en Latinoamérica, también allende las fronteras de la Unión Europea, incluso, que no tienen más objetivo que el explicar a los gobernados lo que por generaciones solo entienden mentes ilustradas, de allí la crítica emanada de Lopez Obrador a los que ha bautizado como intelectuales orgánicos, una forma de reclamo a la dictadura intelectual que han cultivado por décadas al amparo del erario o con el amparo del dinero del pueblo.
De allí también se desprende la acidez dirigida a las clases medias, esas que han alcanzado el privilegio de educarse, de viajar, de alcanzar una cultura general de manera “individualista”, pareciera que ha reclamado el Presidente, con miras a ubicar ese, hasta cierto punto, egoísmo moldeado al tenor de no irradiar – sus logros – a favor de las y los más necesitados,de los pobres del país.
De manera tal que se evidencia que pocas y pocos se han esforzado para entender al Presidente de la República, independientemente de su forma o estilo de gobernar, de decir o hacer las cosas, es verdad que podría ofender o incomodar, pero son los costos del cambio sin violencia, concepto este último que podría ser útil para desenmarañar el maremoto de dichos, ideas, incluso ocurrencias que se podrían interpretar en boca del Presudente de la República, pues a final de cuentas el reflejo de su intento de transformación ha costado sangre, sudor y lágrimas en latitudes distintas a la nuestra, por eso Andrés Manuel López Obrador prefiere pagar el costo de la denostación a llevar al pueblo de Mexico a riesgos que si bien valen la pena para cristalizar el real beneficio en pro de las y los necesitados de este país ha preferido el reiterado “cambio sin violencia”, frase convertida en casi doctrina que no modificará el Presidente de la República para salvar a Marcelo Luis Ebrard Casaubón y como consecuencia sacrificar a Claudia Sheinbaum Pardo.
